jueves, 5 de noviembre de 2009

Treinta y seis parpadeos soñadores


Descomposición - Héctor Ranea
—Composición, tema: “las nubes” —dijo la maestra. Él no entendió, porque entendía que las nubes se descomponían.

No sos vos - Héctor Ranea
El dinosaurio pidió disculpas tardías por haber despertado a Monterroso.

Susto - Héctor Ranea
Cuando desperté, yo todavía estaba ahí.

Caníbal – Héctor Ranea
Me comí un cuento de mil palabras para saber si era digerible. El editor me está exigiendo que se lo envíe rápido, pero soy de digestión lenta.

Carmen María Hernández
Tengo un gran dolor en tu corazón.

Carmen María Hernández
Desaparécete, pero que yo te vea.

Carmen María Hernández
Me duele exactamente el otro pie.

Carmen María Hernández
Era una mentira piadosa, rezaba para que no la descubrieran.

Más oscuro todavía – Sergio Gaut vel Hartman
Descubrió la verdadera naturaleza de aquel agujero negro en el peor momento: cuando caía irreversiblemente hacia él.

Exactitud - Sergio Gaut vel Hartman
Una ley matemática dice que de las locuras de los locos sólo puede salir cordura.

Paciencia - Sergio Gaut vel Hartman
El hombre aguardó la llegada del amor; no desesperó ni perdió la calma. Pero cuando murió se fue al infierno. Preguntó el motivo y le contestaron: la paciencia no es santa; trabaja para nosotros.

Enroque – Sergio Gaut vel Hartman
La sombra quedó tan fascinada cuando se vio en el espejo que expulsó a la imagen que habitaba en él y la obligó a ponerse al servicio del vagabundo al que siempre había acompañado.

Ramón Gómez de la Serna
La bufanda es para los que bufan de frío.

Ramón Gómez de la Serna
Todos los pájaros son mancos.

Ramón Gómez de la Serna
Era un pintor tan viejo que se le habían quedado calvos los pinceles

Ramón Gómez de la Serna
El poeta miraba tanto al cielo que le salió una nube en un ojo.

Cementerio - José Luis Zárate
Inexorablemente lo sembrado dio frutos.

José Luis Zárate
―Si corto todo eso ―dijo Perrault al censor― va a quedar un cuento infantil.

José Luis Zárate
Armaba barcos dentro de caracolas para escuchar el ruido del naufragio.

José Luis Zárate
Nacer: preámbulo para ser fantasma.

Javier López
El río era tan estrecho que sólo tenía una orilla.

Javier López

Lancé una pregunta al aire... ¿cómo podría vivir sin ti?

Javier López
El día que nos fundimos en un abrazo, ya no quisimos volver al estado sólido.

Javier López
El reloj era tan viejo que ya tenía que preguntar la hora.

Oriana Pickmann
Dormía el sueño eterno de la muerte. Despertó en la pesadilla infinita del infierno.

Oriana Pickmann
El jinete galopaba. El caballo sólo lo miraba pasar.

Río - Oriana Pickmann
Mis carcajadas emanan de mi garganta y suenan caudalosamente.

Rápida - Oriana Pickmann
Anoche vi una estrella fugaz, pero fue tan fugaz que no la vi.

Ikal Bamoa
Los amores olvidados no temen a la muerte, pues saben que hay vida más allá de la memoria.

Ikal Bamoa
Aún te sueño cuando consigo dormir.

Ikal Bamoa
Al encenderse la luz, desde la pantalla nos vieron desfilando a casa por orden de desaparición.

Ikal Bamoa
Dí por perdida la guerra cuando leí mi nombre entre las bajas de esa batalla.

Rafael Vázquez
Algunas vidas se parecen tanto a estar muerto, que la muerte las mantiene con vida.

Rafael Vázquez
La sombra del hombre invisible también es invisible.

Rafael Vázquez
Las musas inspiraron la Biblia a Dios.

Rafael Vázquez
Aquel pájaro sin alas volaba arrastrado cuidadosamente por el viento, que lo posaba en las ramas, le acercaba insectos, le construía nidos...

Imagen: Desnudo de Wilmer Lalupu